Por: Oscar Andry Tarazona*
Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú y miembro colaborador del TDA
Desde el 2011, existe la condecoración de la Orden del Árbol de la Quina [1], a través de la cual el Ministerio del Ambiente (MINAM) busca reconocer a personalidades que realicen actividades a favor de la sostenibilidad ambiental. A partir de este año, el MINAM reconocerá a las y los defensores ambientales a través de la condecoración de la Orden del Árbol de la Quina.
Esta medida de reconocimiento a las y los defensores ambientales responde a lo señalado en el Decreto Supremo N° 004-2021-JUS (Artículo 6, inciso c) [2] y en esa línea, sigue el Protocolo del sector ambiente aprobado por la Resolución Ministerial N° 134-2021-MINAM. Por ello, dicha medida goza de alcance nacional e institucional.
En aras de reconocer el papel que cumplen las y los defensores ambientales en el Perú, resulta posible que el Estado peruano, a través del MINAM, brinde una premiación pública y nacional a las y los defensores ambientales con el otorgamiento de la Orden del Árbol de la Quina, aprobado mediante la Resolución Ministerial N° 078 – 2011 – MINAM, en tanto dicha condecoración “busca reconocer los esfuerzos y logros de personalidades que luchan día a día por la defensa del ambiente y la conservación de la biodiversidad, así como de los recursos naturales” (Andina 2011).
Ciertamente, las y los defensores ambientales son aquellas personas que cumplen actividades de defensa y protección de los territorios y de los recursos naturales, así como la garantía del derecho a la autonomía y el derecho a la identidad cultural. Por ello, “mediante sus acciones están defendiendo la justicia ambiental, ya sea a nivel comunitario, nacional o internacional” (Borras 2013, pp. 292 -297).
Sin embargo, como advierte el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (2021), las y los defensores de derechos humanos —que incluye a los defensores ambientales— se enfrentan a un índice creciente de asesinatos, actos violentos, incluida la violencia de género, amenazas, hostigamiento, intimidación, campañas de desprestigio, criminalización, hostigamiento judicial, desalojo forzoso y desplazamiento en el Perú como en otros países de la región (p.20).
En ese sentido, la Orden del Árbol de la Quina representa una oportunidad para conmemorar la actividad del defensor ambiental, pues contribuye en la conservación y el uso sostenible de los recursos naturales, la diversidad biológica y las áreas naturales protegidas. Es importante destacar que la conmemoración a las y los defensores ambientales a través de la Orden del Árbol de la Quina resultará inédita, puesto que en ediciones anteriores no se ha reconocido a ningún defensor ambiental, únicamente se ha premiado a distintas personalidades reconocidas como Gestores de la Conservación, en especial, por su aporte a la academia, en la investigación y la regulación ambiental [3].
A manera de cierre, la condecoración de la Orden del Árbol de la Quina es una medida de reconocimiento inédita para las y los defensores ambientales en tanto evidencia la labor que cumple el defensor reconocido. Asimismo, la condecoración —con una adecuada difusión — sirve de incidencia a favor del defensor ambiental ganador, pudiendo incluso reducir o mitigar su situación de riesgo, a consecuencia, muchas veces, a las actividades ilegales (como la minería ilegal, tráfico de vida silvestre y delitos forestales); inclusive, el reconocimiento debe estar acompañado de una cantidad monetaria a favor del defensor (como ocurre en premios extranjeros), mejora de herramientas tecnológicas e implementación de medidas de protección.
En conclusión, resulta posible a la luz de la Resolución Ministerial N° 078-2011-MINAM reconocer a las y los defensores ambientales a través de la Orden del Árbol de la Quina, en tanto, su labor sirve para contribuir en la conservación y uso sostenible de los recursos naturales, la biodiversidad y las áreas naturales protegidas.
Notas:
[1] A través de la Resolución Ministerial N° 078 – 2011 – MINAM. Es importante destacar que, el árbol de la quina (Cinchona officinalis) es un símbolo nacional y figura en uno de los tres campos del escudo nacional.
[2] Que aprueba el Mecanismo intersectorial para la protección de las personas defensoras de derechos humanos.
[3] Las siguientes personalidades han sido reconocidas con dicha condecoración: i) Gregorio Ríos (agricultor) en 2021, ii) Ronald Woodman (investigador y científico) en 2016, iii) María Rostworowski (historiadora e investigadora social) en 2015, iv) Flavio Bazán Peralta (ingeniero agrónomo) en 2015, v) Bárbara D’Achille (ecologista y periodista) en 2015, vi) Paul Víctor Pierret (ingeniero agrónomo) en 2015 y vii) Paul McCartney (compositor y cantante) en 2011. Es importante destacar que, en todas ediciones señaladas de la condecoración, no se ha presentado convocatoria de postulación, sino que ha sido a través decisión política.
*”Las opiniones expresadas en el presente son de exclusiva responsabilidad del/la autor/a y no necesariamente reflejan los puntos de vista del Taller de Derecho Ambiental”.
Fotografía: SPDA (Actualidad Ambiental)
REFERENCIA:
Andina. (2011, 05 de mayo). Paul McCartney será condecorado con la Orden del Árbol de la Quina. https://andina.pe/agencia/noticia-paul-mccartney-sera-condecorado-con-orden-del-arbol-de-quina-357062.aspx
Borrás, S. (2013). El derecho a defender el medio ambiente: la protección de los defensores y defensoras ambientales. Revista de la Facultad de Derecho PUCP, 70, 291 – 394. https://revistas.pucp.edu.pe/index.php/derechopucp/article/view/6755/6872
ONU (2021). Última advertencia: los defensores de los derechos humanos, víctimas de amenazas de muerte y asesinatos, Documento de la ONU A/HRC/46/35. https://reliefweb.int/sites/reliefweb.int/files/resources/A_HRC_46_35_S.pdf
